Hierbas aromáticas frescas, mira a ver si puedes conseguir, quedan riquísimas, varía el sabor y lo refuerza, pregunta en tu tienda de verduras habitual, si no puede ser, pues nada, las secas de toda la vida de dios.
Relleno: Te va a sobrar relleno, hacer justo es muy complicado, como no es día para pensar mucho, yo lo guardé en una bolsa apta para congelador y lo congelé, ¿sabes lo que pienso hacer? cualquier domingo que ponga un
pollo al horno, le pongo ese relleno que ya está listo.
Guarnición: Las cantidades son un poco a tu criterio y necesidades, dependiendo de si sois muchos o pocos, igual te sobra. Puedes poner menos cantidad, aunque si te sobra, te aseguro que está tan deliciosa que la guardas en la nevera tapada con film transparente y al día siguiente o a los dos días, te encantará encontrártela.
Jugos del horneado: Puedes servirlos en salsera, habrá quien le guste aderezar la carne con ellos. Sinceramente, este asado ha quedado tan jugoso que yo no he querido poner esos jugos del asado porque tienen mucha grasa y no hay necesidad.