Pon una olla con agua a calentar (previamente habrás de asegurarte que el molde cabe dentro de ella) no olvides poner dentro de la olla el soporte que sostendrá el molde.
Engrasa y enharina el molde y reserva.
Ralla la piel de una naranja y reserva.
Pela la naranja "a vivo" que no le quede nada de piel, córtala en trozos (asegúrate que no tiene semillas), agrégala al vaso de la batidora y tritura. Reserva.
Añade al bol de la elaboración el azúcar y los huevos y mezcla con varillas (eléctricas o manuales) hasta blanquear y que duplique (o casi) su volumen inicial.
Añade el aceite y continúa mezclando.
Agrega la harina tamizada con la pizca de sal, la levadura de repostería y el bicarbonato en 3 tandas batiendo de cada vez y alternando con la naranja triturada.
Vuelca la mezcla en el molde, cierra con la tapa y coloca dentro de la olla y pon la tapa de la olla.
Apura el fuego para conseguir que el agua comience a hervir cuanto antes, una vez que llegue a punto de ebullición, baja a temperatura media-alta(en mi placa que tiene un máximo de 9, la he tenido a 7) y deja cocinar durante 65 minutos.
Finalizada la cocción, apaga el fuego, retira el molde de la olla, espera 10 minutos y desmolda sobre una rejilla y deja enfriar.
Cobertura
Añade el azúcar glas a un bol, agrega 2 o 3 cucharadas de zumo de naranja y vas viendo la textura, debe quedar una crema bien espesa.
Cubre con el glaseado y decora.