Nos vamos a un libro de recetas antiguas de respostería gallega de esas que ponen "harina la que admita" para elaborar esta deliciosas roscas o rosquillas con ingredientes tan singulares como el aguardiente y el zumo de limón. Son un puro deleite, os van a sorprender y enamorar a partes iguales.
440gde harina de trigo de todo uso (yo he utilizado trigo gallego por eso el color oscuro que véis)
10cdas soperasde azúcar
3cdas soperasde aceite de oliva
1/2 copade aguardiente (unos 30 ml)
2huevos L
3parejasde gasificantes de EL TIGRE
Para la terminación
1 1/2de zumo de limón
azúcar glas
Para la fritura
Aceite de girasolo de oliva suave
Elaboración paso a paso
HARINA LA QUE ADMITA
Así se explicaban antiguamente las recetas y así detalla esta receta el libro de repostería gallega tradicional por el cual las he hecho. Decidí empezar con 250 g de harina y fui añadiendo a medida que la masa lo iba pidiendo, eso sí, anotando el peso de cada una de las adiciones y el número de parejas de gasificantes utilizados. Al final (lo tenéis en los ingredientes) empleé un total de 440 g de harina y 3 pares de gasificantes (se aconseja usar una pareja de sobres (o un gasificante doble) de gasificantes por 125 g de harina) . No obstante, conviene que vosotros hagáis vuestra propia fórmula de "harina la que admita" porque yo he utilizado harina de trigo gallego que al ser menos refinada, absorbe más líquido, así que es posible que necesitéis un poco más de harina. Yo os recomiendo empezar con 350 g de harina y váis añadiendo hasta obtener una masa con cuerpo como para formar unas rosquillas.
Empezamos
Preparamos todos los ingredientes, los pesamos y los ponemos en la mesa de la elaboración
En un bol, ponemos dos huevos, agregamos el aguardiente, el azúcar, el aceite y mezclamos bien hasta blanquear
Tamizamos 250 g de harina y dos gasificantes dobles y lo vamos añadiendo a la mezcla anterior. Como la mezcla está aún muy líquida, añadimos 190 g más de harina con un sobre doble de gasificante tamizado. Formamos una bola con la masa y refrigeramos en un bol cubierta con una cofia durante media hora.
Retiramos la masa, y formaremos bolitas de masa de entre 20 y 25 g (podéis hacerlas del tamaño que más os guste) y con el mango de una cucharita haremos el agujero central que ensancharemos un poco más formando las rosquillas. Iremos poniendo las rosquillas sobre una bandeja o superficie enharinada. Cuando las tengamos todas formadas, las dejaremos reposar 10 minutos
Exprimimos el zumo de limón y lo ponemos en un biberón de cocina y reservamos.
Calentamos el aceite a unos 166º y comenzamos la fritura, mantener un calor constante a unos 160º e ir friendo entre un minuto o minuto y medio de cada lado. Pasar las rosquillas a un escurridor a fin de eliminar el exceso de aceite
Después de escurrir las rosquillas, pasarlas a una rejilla y rociar zumo de limón con el biberón que hemos preparado. A continuación, espolvorear azúcar glas.
Servir y disfrutar
Frabiconsejos
- Es importante encontrar el punto de calor justo del aceite, no debe de estar demasiado caliente o las quemará por fuera y quedarán crudas por dentro. Lo ideal es medir con un termómetro la temperatura de aceite y que esté a 166 o 168º y mantener la temperatura mientras se fríe a 160º. En mi placa de inducción del 1 al 9, mientras estoy friendo la pongo al 5 1/2.
Conserva las rosquillas en un recipiente hermético.
Si no encuentras los gasificantes de El Tigre, puedes poner un sobre de levadura de repostería o para bizcochos.
TRUCO: Es adecuado poner el zumo de limón en las rosquillas y darlas vuelta antes de espolvorear el azúcar glas.