Las Cañas rellenas de crema son un postre muy habitual en la gastronomía gallega y especialmente famosas son las cañas fritas de Ourense aunque es habitual encontrarlas en cualquier parte incluso en las cartas de los mejores restaurantes.
Vierte en un bol todos los líquidos y mezcla ligeramente con unas varillas.
En otro bol de mayor tamaño, vuelca las harinas y la pizca de sal, haz un hueco en el centro a modo de volcán y vierte los líquidos que acabas de mezclar.
Mezcla todo con una cuchara de madera hasta que más o menos se integre aunque quede con grumos. Retira la cuchara de madera y comienza a amasar con la mano, verás que es una masa que liga enseguida.
Pasados un par de minutos que ya tengas la masa ligada, vuélcala en una mesa de trabajo ligeramente enharinada y termina de ligar amasando suavemente unos 3 o 4 minutos.
Envuelve la masa en un film transparente y déjala reposar una media hora.
Pasada la media hora recupera la masa y trabaja la masa un poco con las manos para que recupere elasticidad. Vuelve a envolver la masa y guárdala en la nevera por espacio de 30 minutos.
Mientras puedes hacer la crema pastelera del modo que te expliqué AQUÍ.
Recupera nuevamente la masa de la nevera, amásala unos segundos para que se manipule más facilmente.
Toma un trozo de masa y estírala con el rodillo muy finalmente, puedes hacer un rectángulo sin que las medidas deban ser rigurosas, pero que tenga un largo de entre 20 y 25 cm y un ancho de unos 2 cm.
Con cada tira vamos enrollando el molde de caña o de metal, podemos preparar tandas de 8 o 10 y freír y continuar el proceso hasta acabar la masa.
Fritura.
Ponemos aceite suficiente en un cazo de tal manera que las cañitas bailen en el aceite cuando se estén friendo.
El aceite debe estar a una temperatura de unos 170º , para saberlo con exactitud deberás tener un termómetro de cocina (sino lo tienes puedes apuntarlo en la lista de deseos porque te será muy últil) y sino lo tienes, pues "a ojo" que también es una fórmula, recuerda que el aceite deberá estar caliente pero no debe humear.
Colocas con cuidado unas 3 o 4 cañitas en el aceite caliente y las vas girando con dos tenedores hasta conseguir un bonito color dorado.
Las pasas a un colador para escurran el aceite y al tiempo que enfríen.
Cuando hayan enfriado un poco puedes desmoldarlas y pasarlas por azúcar e ir pasándolas a una fuente a la espera de rellenarlas.
Finalmente pones la crema pastelera en una manga con boquilla redonda de 1 cm y medio aproximadamente y rellena las cañitas.
Frabiconsejos
Rellena de crema solo las cañitas que vayáis a consumir en el momento.
Guarda el resto de la crema en la manga pastelera y a medida que vayas necesitando las rellenas en un momento y así mantendrás el crujiente de la cañita, sin embargo si te sobran cañitas rellenas no es que vayan a estar mal, pero el crujiente se perderá.