- Precalienta el horno a 180º con calor arriba y abajo

- Trabaja la mantequilla reblandecida hasta que este cremosa. Añade el azúcar y bate la mezcla hasta que esté espumosa.

- Incorpora los huevos uno a uno, mezclando bien cada vez antes de añadir el siguiente.

- Agrega la harina de repostería tamizada con la Maizena, la pizca de sal y la levadura. Mezcla bien hasta obtener una masa lisa e incorpora el Ron.

- Incorpora las nueces, las frutas cortadas a dados y remueve hasta que se mezclen con la masa.

- Vierte en un molde cake engrasado o, forrado de papel vegetal, haz una línea central con una espátula y hornea a 180º durante 60 minutos más o hasta que pinchando con un palillo este salga seco. Controla los últimos minutos y si ves demasiado dorada la superficie, cúbrela con papel de aluminio hasta el final de la cocción

- Retira del horno, espera diez minutos y con cuidado tirando por el papel, pasa el cake a una rejilla.

Mezcla el azúcar glas con un poquito de leche hasta obtener una pasta espesa. Distribuye sobre la superficie del cake, deja que caiga en chorretones. Decora con frutas.

Opción B: Puedes servirlo así o espolvorearlo con azúcar glas.