Preparamos el jamón cortado menudo y rallando el queso de modo grueso. Reservamos.

Pon una sartén al fuego con aceite, corta las patatas finas como para tortilla y cuando el aceite esté caliente (sin humear) añade las patatas, salpimenta,cubre con una tapa y deja freír a fuego medio-bajo.

Revuelve de cuando en vez y cuando las patatas estén tiernas retíralas con una espumadera para un colador de malla fina para que escurra el exceso de aceite.

Bate los huevos (no demasiado) salpimenta, agrega las patatas, mezcla bien, rompe un poco las patatas con el tenedor.

Pon la sartén al fuego con una gotita de aceite, cuando esté caliente, vuelca la mitad de la mezcla patatas-huevo, distribuye el jamón, el queso y cubre con el resto de la mezcla de patatas-huevo.

Mueve la sartén sobre la placa con movimientos de vaivén para evitar que se pegue, deja 2 o 3 minutos y da la vuelta la tortilla con un plato o una tapa.

Deja cuajar del otro lado un par de minutos y retira, con el calor residual se terminará de cuajar.

Una vez en la fuente de servir, espera 5 minutos antes de servir así terminará de asentar.

Sirve acompañada de un buen pan, ensalada o degusta tal cual.