Bate los huevos con el azúcar hasta que blanqueen (unos 5 minutos con varillas eléctricas)

Incorpora el aceite, la leche, el yogur natural y bate hasta incorporar.

Añade en tres tandas la harina tamizada con la levadura, baja la velocidad e incorpora.

Agrega la ralladura de limón y mezcla.

Rellena las cápsulas en sus 2/3 partes.

Hornea durante 15-20 minutos en horno precalentado a 180º.

Comprueba que estén cocidos pinchando con un palillo y si sale seco, los pasas a una rejilla para que enfríen.

Derrite el chocolate en el microondas a 450W en fracciones de 30 segundos y con mucho cuidado porque el chocolate blanco es muy delicado y se quema enseguida. Reserva.

Hidrata las hojas de gelatina en abundante agua fria durante 5 minutos.

Semimonta la nata, añade el queso y continúa batiendo hasta integrar.

Agrega el chocolate blanco y mezcla.

Calienta la leche (debe estar caliente pero no hervir) en el microondas y disuelve en ella las hojas de gelatina escurridas y añádela a la mezcla.

Agrega las gotitas de extracto de limón.

Vierte la crema en una manga pastelera y refrigera para que tome cuerpo durante un par de horas (yo la puse en el congelador una media hora).

Ponemos todos los ingredientes al fuego y llevamos a ebullición durante 5 minutos. Reservar.

Pinta los cupcakes con el almíbar para emborracharlos, para que entre mejor el almíbar, antes puedes pincharlos con una brocheta haciendo agujeritos, de ese modo la miga absorbe más.

Haz el copete con la crema de la manga pastelera, ralla limón por encima y decora con un poquito de azúcar amarillo (opcional).

Sirve