Molde redondo de 32 cm de diámetro.
Conviene que utilices calabacines no demasiado grandes porque son más tiernos, lo mismo ocurre con la berenjena.
Si sobra, cubre con film transparente y refrigera. No conviene congelar.
Puedes prescindir de hacer la masa en casa y comprar hecha una lámina de hojaldre o masa BRISA.