Engrasa el molde con mantequilla o spray desmoldante, espolvorea harina y gira el molde hacia abajo para eliminar la sobrante. También conviene poner un círculo de papel vegetal en la base del molde.
Mezclamos la mantequilla con el azúcar y la ralladura de limón hasta obtener una crema homogénea
Agregamos la ricotta continuamos mezclando.
Añadimos los huevos de uno en uno no añadiendo el siguiente hasta que el anterior no se haya integrado totalmente.
Incorporamos la harina tamizada con el impulsor y en 2 o 3 tandas, con movimientos suaves hasta obtener una mezcla bien integrada y sedosa.
Volcamos la masa en el molde y horneamos en horno precalentado a 170º, unos 50 minutos más o hasta que pinchando con un palillo o brocheta, salga limpio, en caso contrario deberás de hornear unos minutos más.
Finalizado el horneado, retira el molde del horno, aguarda 10 -12 minutos y desmolda sobre una rejilla hasta que enfríe totalmente.
Espolvoreamos con azúcar glas y disfrutamos