Enciende el horno a 200º de temperatura
Limpia el pollo con cuidado, eliminando todas las pequeñas plumillas que traen, lávalo debajo del grifo por dentro y por fuera.
Sécalo con papel de cocina y salpimenta.
En un pequeño cuenco, mezcla el orégano, el tomillo, y el aceite de oliva con el zumo de una mandarina. Embadurna el pollo con esta mezcla.
Coloca en una fuente de hornear un lecho de cebolla cortada en rodajas, espolvorea sal y coloca el pollo encima. Añade por los lados el resto de mandarinas cortadas en rodajas con piel.
Hornea durante una hora aproximadamente, a los 15 minutos baja la temperatura del horno a 180º.
Cuando esté bien doradito, apaga el horno y deja reposar diez minutos antes de trinchar.
Presentación
- Sirve con la cebolla, alguna rodaja de mandarina y puedes acompañar con alguna verdura, patatas o pasta fresca.