Prepara todos los ingredientes que has de utilizar en esta elaboración y colócala en cuencos o platitos por separado para que cuando llegue el momento del montaje nada tenga que esperar.

Haz el huevo revuelto en una sartén con unas gotitas de aceite y una pizca de sal y pásalo a un plato.

Tuesta el pan por ambos lados, bien en sartén o en tostadora, riega con un fino hilo de aceite de oliva. Reserva.

Lava la lechuga, escurre bien y pásalo a un plato junto con las rodajas de tomate a la que espolvorearás una pizca de sal.

Forma la hamburguesa, utiliza para ello las manos o un aro de emplatar. Pon al fuego una sartén de fondo grueso o una plancha, vierte una cucharada de aceite de oliva y cuando esté bien caliente, desliza la hamburguesa, queremos que la temperatura alta forme costra a la hamburguesa y permita mantener un interior jugoso (el punto de cocción se lo darás según tus gustos), en cuanto le des vuelta, espolvorea sal, pimienta negra y coloca los quesos, sigue manteniendo la temperatura de la placa alta, pon una tapa en la sartén para que se genere un poco de vapor y se funda el queso, esto se hace muy rápido, no te descuides para que no se seque la carne. Apaga el fuego.

Montaje

Dispón la primera rodaja de pan, cúbrela con la lechuga, el tomate y con una espátula coloca con cuidado la hamburguesa cubierta de los quesos, pon la segunda rodaja de pan, y encima de esta segunda rodaja, riega con un hilo de aceite y cubre con el huevo revuelto, encima el bimi y una cucharada de salsa de yogur, finalmente cubre con la tercera rodaja de pan. Pincha con dos brochetas pinchadas previamente en una aceituna en cada mitad del sadwichburguer y córtalo a la mitad y sirve.