Enciende el horno a 180º para que se precaliente.

Engrasa el molde y espolvoréalo con harina, también puedes forrarlo con papel vegetal. REserva

El día o noche anterior asamos la calabaza según las instrucciones que puedes ver AQUÍ.

Derrite los 100 gr. de chocolate en el microondas en fracciones de 30 segundos y revolviendo de cada vez hasta que se derrita totalmente u otra opción es derretirlo a baño María. Reserva.

Tamiza las harinas, la sal, el bicarbonato y la levadura de repostería. Reserva.

Mezcla la calabaza con el azúcar con unas varillas manuales o eléctricas durante cinco minutos.

Añade los huevos uno a uno, no agregando el siguiente hasta que el anterior se haya integrado perfectamente.

Añade el aceite e integra.

Incorpora poco a poco a poco las harinas tamizadas, alternando la adicción de la leche y mezcla con firmeza para evitar grumos.

Agrega por último el chocolate derretido y mezcla con movimiento envolventes.

Vierte la mezcla en el molde y hornea durante 50 minutos aproximadamente o hasta que pinchando con un palillo o brocheta, esta salga limpia.

Una vez horneado esperamos diez minutos y desmoldamos sobre una rejilla hasta que enfríe totalmente.

Calienta la nata con la miel hasta que llegue a punto de ebullición, apaga el fuego, incorpora el chocolate troceado y la mantequilla, mezcla hasta forma una crema.

Con una cuchara, manga pastelera o biberón de cocina riega con el ganache de chocolate de forma irregular toda la superficie del bizcocho y espolvorea con los pistachos picaditos.