Enciende el horno a 170º con calor abajo y arriba, poniendo la rejilla en la segunda guía del horno comenzando a contar desde abajo.
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Tritura las galletas en tu robot de cocina o ponlas en una bolsa de congelados, ciérrala bien y pasa el rodillo sobre la misma hasta conseguir moler las galletas.
Añade a las galletas molidas la mantequilla y el cacao en polvo, mezcla bien.
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Reparte la mezcla de galletas sobre la base de un molde previamente forrado de papel vegetal, distribuye bien y presiona ligeramente para formar una capa uniforme. Refrigera hasta el momento de usar.
Pon en un cazo la leche al fuego con la vainilla y la ralladura de limón, cuando esté a punto de hervir, apaga el fuego . Reserva.
En un bol mezcla la leche condensada con los huevos.
Agrega el queso y continúa mezclando hasta integrar, incorpora la maizena y la mezcla de leche con vainilla y la ralladura de limón que habías reservado, mezcla todo.
Recupera el molde del refrigerador, vierte la mezcla sobre el reverso de una cuchara así conseguirás que esta caiga en forma de lluvia y no sobre un punto fijo de la galleta ya que podría agujerearla.
Hornea 15 minutos a 170º.
Baja la temperatura del horno a 160º y hornea 60 minutos más.
Cuando la superficie de la tarta esté firme aunque en el centro esté un poquito menos firme, ya estará lista.
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Apaga el horno, entreabre la puerta y déjala así ayudándote de una cuchara de madera para ello.
Cuando haya pasado una hora, retira la tarta del horno y déjala enfriar totalmente.
Cúbre la tarta con film transparente y refrigera durante 3 o 4 horas para que se termine de asentar.
Cobertura.
Pon la nata en un cazo al fuego con la miel, cuando esté a punto de hervir, apaga el fuego y añade el chocolate troceado, aguarda 3 o 4 minutos, añade la mantequilla y mezcla hasta formar una crema homogénea.
Espera unos 10 o 15 minutos a que el chocolate se temple un poco y viértelo en un biberón de cocina, haz líneas cruzadas en la superficie de la tarta de modo irregular. En distintos puntos de los bordes, vierte un poco más de chocolate a fin de que caigan unos chorretones decorativos..
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Decora con el cesto de chocolate relleno de frutos rojos que tengas.
Sirve