(común para la elaboración manual o en thermomix)
Encendemos el horno a 175º para que precaliente mientras preparamos la masa. Calor arriba-abajo y la rejilla colocada en la segunda guía del horno comenzando a contar desde abajo.
Pinta el molde con un trozo de mantequilla, utilizando para ello un pincel de silicona o papel de cocina . Es importante llegar a todos los rincones del molde para conseguir un desmoldado perfecto. Espolvorea cacao en polvo, podrías usar harina, pero como es un bizcocho de chocolate después quedarían manchas blanquecinas poco estéticas. En este tipo de molde es ideal usar spray desmoldante
Puré de remolacha cocida: Cortas las bolas de remolacha y las pones en el vaso y las trituras bien sea con la thermomix o con el brazo de tu batidora
Tamiza la harina, con el cacao en polvo, el bicarbonato, la sal y reservar.
Derretir el chocolate negro a baño maría o en el microondas en fracciones de 20-30 segundos revolviendo de cada vez. Reserva y dejar templar
Elaboración (Thermomix )
Ponemos la mariposa en la thermomix y batimos la mantequilla con el azúcar hasta conseguir una mezcla esponjosa. (aproximadamente unos 3 minutos a veloc. media)
Añadimos los huevos uno a uno batidos ligeramente a veloc. baja. Esperamos a se haya mezclado bien el huevo antes de añadir el siguiente.
Agregamos la vainilla
A velocidad mínima, vamos incorporando el puré de remolacha, el chocolate derretido y la harina. Dejamos la máquina funcionando unos minutos hasta que comprobamos que la masa ha quedado totalmente integrada.
Vertemos la mezcla en el molde. Alisa la superficie con la espátula y damos unos golpecitos del recipiente sobre un paño colocado sobre la encimera o sobre el suelo para conseguir que asiente la masa y eliminar burbujas que nos afearían el resultado final.
Horneamos 55 minutos a 175º C o hasta que comprobando el punto de cocción la brocheta con el que lo pinchemos salga limpia.
Elaboración manual
Mezcla el azúcar con la mantequilla utilizando unas varillas eléctricas o manuales para ello, mezcla durante unos minutos hasta obtener una mezcla blanquecina.
Añade los huevos uno a uno y mezcla de cada vez, no añades el siguiente huevo hasta que el anterior no esté totalmente integrado.
Añade la vainilla.
Agrega el puré de remolacha y el chocolate negro derretido, continúa mezclando.
Incorpora la harina tamizada con el cacao en dos tandas, primero la mitad apróximadamente y mezclas y después la segunda y última mitad y continúa mezclando hasta que esté bien integrado.
Vertemos la mezcla en el molde. Alisa la superficie con la espátula y damos unos golpecitos del recipiente sobre un paño colocado sobre la encimera o sobre el suelo para conseguir que asiente la masa y eliminar burbujas que nos afearían el resultado final.
Horneamos 55 minutos a 175º C o hasta que comprobando el punto de cocción la brocheta con el que lo pinchemos salga limpia.
Finalizado el tiempo de horneado, retiramos el molde del horno, dejamos templar durante 10-12 minutos antes de desmoldar.
Pasado este tiempo, movemos un poco el molde para conseguir con certeza que se despega con facilidad el bizcocho del molde y desmoldamos boca abajo sobre una rejilla en la que dejaremos enfriar totalmente.
Terminación (común para la elaboración manual o en thermomix)
Calentamos la nata en un cazo con la miel hasta llegar a hervir, apagamos el fuego, añadimos el chocolate troceado, aguardamos 2 o 3 minutos y mezclamos con unas pequeñas varillas hasta formar una cremita. Dejamos templar hasta que espese un poco, si ponemos el cazo en la nevera espesará antes, no debe quedar sólida, solo más cremosa para poder untar la supeficie.
Con una cuchara o una espátula vamos cubriendo el bizcocho por toda la superficie, lo hacemos groseramente, queremos darle un toque rústico y casero, espolvoreamos pistachos picados.
Servimos