Hacer pan me encanta, es una actividad muy enriquecedora, relaja, es agradable hundir las manos en una masa sedosa y resulta delicioso ver como evoluciona a través de los minutos volviéndose dócil y manejable.
Utilizar MASA MADRE en la elaboración de pan casero es otra realidad tan diferente que solo experimentándola podremos reconocerla.
Mañana es el día MUNDIAL DEL PAN y me adelanto a su celebración con esta BOLLA GALLEGA DE MASA MADRE (alta hidratación) cuya receta y sabios consejos me dió un experto en masas como es O Pelouro si tenéis instagram y os gusta el mundo del pan, no dejéis de seguirlo, es un crack.
El que me guste hacer pan no significa que sea una experta, es más, no soy una experta en nada porque en cocina soy muy dispersa, me gusta hacer muchas cosas y por ello no me especializo en ninguna, es delicioso para mí no estar sujeta a hacer algo en concreto. Os lo digo porque me preguntáis si podéis cambiar esta harina por esta otra, etc. etc. y yo os digo que esta receta la hice tal cual está escrita pero que no le tengáis miedo ni a las masas ni a la cocina, experimentad, de los experimentos salen grandes genialidades y alguna chapuza, no pasa nada, se comerá igual y seguro que aprendéis.
Lo dicho, ¡¡¡feliz día del pan!! por adelantado.
Esta receta y los pasos a seguir me los guió
Bolla gallega de MM (alta hidratación)
Ingredientes
- 320 g de harina de GRAN FUERZA MANITOBA
- 130 g de harina semi integral T-80
- 50 g de trigo del país
- 200 g de MM muy activa recetaaquí
- 450 ml de agua templada
- 10 g de sal
Elaboración paso a paso
- Añadir al agua la MM y mezclar.
- Añadir al bol de la amasadora las harinas y el agua mezclada con la MM, amasar durante 8 minutos a veloc media-baja, comprobamos que todo esté mezclado.
- Volcar la mezcla en un bol aceitado, cubre y dejar reposar una hoa.
- La masa se pega con solo mirarla, paciencia, es alta hidratación, aceitar las manos para manipularla pero NO añadir harina.
- Pasada la hora, espolvorea la sal por encima y haz pliegues para integrar bien la sal.
- A continuación haz pliegues cada 40 minutos. Conviene hacer unos 4 pliegues.
- Deja levar a temperatura ambiente (19º) durante 4 horas.
- Pasadas las 4 horas aceita la encimera, haz un laminado y un preformado. Guarda la masa en un banetton y refrigera 12 horas.
- Recupera la masa de la nevera y vuélcala en la encimera aceitada o enharinada y forma una bola y pásala sobre un papel vegetal.
- Enciende el horno a máxima potencia (en mi caso 280º) con calor arriba y abajo y una piedra de hornear en el horno.
- Pon debajo una fuente con piedras.
- Pasada una hora, haz un hueco en el centro de la bola de masa, abre un poco el agujero central, efectúa un greñado rápido.
- IMPORTANTE: Cambia la función del horno a calor abajo solamente y baja a 250º
- Introduce con cuidado la bolla sobre la piedra caliente en el horno, vierte un vaso de agua hirviendo sobre las piedritas calientes, se generará un montón de vapor, cierra rápido la puerta del horno,programa 20 minutos. Durante este tiempo la greña del pan se abrirá al hornear con vapor.
- Pasados los 20 minutos, abre el horno, deja salir el vapor, retira la bandeja de abajo del pan, la que tiene las piedras, vuelve a cambiar la función del horno a CALOR ARRIBA Y ABAJO a 230º y hornea durante 30 minutos o hasta que esté bien doradito.
- Retira el pan a una rejilla, deja enfriar y sirve.
A disfrutar