Las sopas o cremas  se han convertido en uno de mis platos favoritos y me consta que también los de muchos de vosotros.  La variedad de ingredientes  y las fórmulas  para elaborar una sopa/crema deliciosa son infinitas.
Su utilidad está fuera de toda duda, en cualquier ocasión que pensemos irá bien una crema o sopa de verduras y a nivel nutritivo son formidables.
Hoy quiero contaros mis  DIEZ FRABICONSEJOS para que que vuestras sopas sean más ricas, luzcan con colores más intensos y resulten las más apetecibles, vamos a desterrar el tópico de que las verduras hervidas y las cremas son solo para enfermos. Vamos a convertirlas en más sabrosas y apetecibles, tanto que hasta los más reticentes adorarán las cremas/sopas a partir de ahora.
1º) El GRAN PROTAGONISTA, “EL CALDO”.
Podemos usar agua para nuestras sopas o cremas  sin embargo un buen caldo nos garantiza una sabrosa sopa y muchas  veces es cuestión de organizarse para tener todo a punto y hacer un delicioso caldo en apenas unos minutos. Recuerda cuando vayas a la carnicería llevarte algunas carcasas de pollo, para que no ocupen puedes pedir que las “aplasten” y así te ocuparán menos en el congelador, lleva también algún hueso de tenera y congélalos de ese modo podrás hacer uso de ellos para hacer un caldo rápido  y delicioso.

Utiliza la olla a presión, reducirás tiempo y concentrarás sabores.

Hervir: Es importante que la temperatura del liquido suba lentamente hasta llegar al punto de ebullición para que de ese modo se liberen las impurezas que suben a la superficie en forma de espuma. En el momento que llegue a hervir, hay que bajar la temperatura.

Espumar: Una vez que se ha formado una capa de espuma, debe extraerse con una espumadera para que el caldo no la vuelva a absorber.

Sazonar: Las hierbas y condimentos se añaden siempre después de haber terminado la fase de espumación.

Cocer lentamente: Se reduce el fuego al punto más bajo posible para que el líquido no llegue a romper el hervor y se tapa la olla a medias; la temperatura debe permanecer así durante todo el resto de la cocción para que la grasa y la espuma no se mezclen con el caldo y lo enturbien.

Desgrasar: Cuando hayas finalizado de cocinar el caldo y lo cueles, conviene que lo dejes enfriar y lo refrigeres, en ese momento la grasa se solidificará en la superficie y podrás retirarla con facilidad.

Siempre puedes usar caldos comprados, los hay buenos y de calidad, aunque también son caros. Otra opción son las pastillas de caldo concentrados, siempre es un recurso del que se puede hacer uso sin remordimientos, no siempre tenemos tiempo a hacerlo todo, lo que si es cierto que si tienes pastillas de caldo CASERAS, tendrás caldos mucho más saludables y sin químicos añadidos.

2º) VERDURAS y HORTALIZAS:  A la hora de pensar en que sopa o crema vas a hacer, piensa en  la estacionalidad y vincula los ingredientes, es fácil y siempre funciona. Las verduras de temporada siempre  están en su momento de mayor esplendor, resbordantes de sabor y calidad, aprovéchalas.

CADA VERDURA, su tiempo no lo olvides. No todas tienen el mismo tiempo de cocción así que conviene que las vayas añadiendo a la olla según su grado de dureza. Es importante acostumbrarse que NO todas las verduras se deben cocer, algunas pueden consumirse crudas aunque sea en cremas o sopas.

Cuando ya han terminado de cocer todas las verduras y hortalizas, apaga el fuego y agrega aquellas verduras que pueden comerse crudas como pueden ser espinacas tiernas, lechuga, etc.  Las añades y después las trituras o las dejas enteras con el resto de las verduras.

EMPEZAR DORANDO ES TERMINAR EN LA GLORIA.  Nada mejor para hacer una sopa o una crema de verduras deliciosa que empezar rehogando (en la olla en la que cocineramos el resto) ajo, puerro, cebolla o cebolleta, dorando el pollo (o el esqueleto) en un poco de aceite de oliva. Dejaremos que el sofrito tome un poco de color, agregamos verduras, las dejamos dorar unos 3 o 4 minutos y tendremos una base regia para continuar.

En este punto es también cuando se le puede agregar las especias y darles un toque fuerte de calor para que desprendan sus mejores aromas, a partir de este momento, agregamos agua o caldo. Si empezamos dorando la carne o verduras el sabor ya se queda fijo y los jugos se concentrarán de tal manera que ya se quedarán en  nuestra sopa o crema de verduras  conviertiéndolo en un plato exquisito, lleno de sabor y muy saludable.

3º) Las HIERBAS AROMÁTICAS son un potenciador natural  del sabor  y un aliado perfecto a la hora de aromatizar nuestros CALDOS, SOPAS o CREMAS, no las olvides. Lo mejor es hacer un atillo con ellas y retirarlas al finalizar a cocción, sobre todo si se trata de una crema que vas a triturar. Durante la cocción, utiliza las denominadas hierbas resistentes como romero, tomillo, orégano, laurel ... y retíralas al final de la cocción.

Al final de la cocción añade aquellas que sean más delicados como albahaca, perejil, cebollino, menta, cilantro, limoncillo  etc.
4º) SALSAS PREPARADAS como aderezo. También puedes agregar salsas preparadas como pesto , salsa romescu, tomate concentrado, carne de ñora, simplemente una pequeña cucharadita dará una nueva dimensión a tus sopas o cremas.
Entre las salsas orientales me he aficionado mucho a utilizar la Salsa de soja(ojo que aporta sal), la salsa de pescado o la de ostras. Muy rico le queda también la salsa Perrins (Worcestershire), algo de guindilla si te gusta el picante. Todo ello con moderación y buscando el equilibrio en una sopa o crema bien sazonada pero no pecando de intensidad en el especiado.

Maravillosas resultan las ESPECIAS como cúrcuma, todas las del Tajine, Ras el Hanout, jengibre, pimentón, etc. conviene añadirlas en el momento de que ya hemos hecho el sofrito, darles un toque de calor antes de agregar el caldo, de este modo potenciaremos todo su sabor.

¿Asamos previamente las hortalizas? en según que crema o sopa, aso la calabaza o la cocino en el microondas y cuando el resto de las verduras están listas, las añado.

TRITURAR O NO TRITURAR: Dependiendo del tipo de verdura utilizada igual queremos encontrar tropezones y en este caso la dejaremos entera, pero si hemos tenido prisa y hemos puesto la verdura cortada grande, es mejor triturar porque nos resultará más fácil de degustar.
5º) UN LÁCTEO siempre aporta cremosidad al conjunto, puedes poner una cucharada de yogur en la superficie de la sopa o crema o añadir a la crema antes de triturar un trozo de queso, medio vaso de leche de coco o leche de vaca/soja, verás que el resultado es óptimo. Según tus gustos los quesos curados aportan mucho sabor, pero el mascarpone, los quesos de oveja, parmesano, o grana padano dotarán tu plato de verduras en un espectáculo de cremosidad.
o el MISMO EFECTO SIN LÁCTEO, para intolerantes, veganos o alérgicos se puedo optar por  añadir leche de coco que queda muy suave, o cualquiera de las natas vegetales que aportan cremosidad y una textura deliciosa a las cremas y que podemos encontrar en los refrigerados de los supermercados.

6º) TOQUE CRUJIENTE, se lo puedes aportar espolvoreando semillas de sésamo, chía, piñones, nueces troceadas, almendras o avellanas, conviene eso sí, dorarlas previamente en una sartén sin aceite, no sólo esteticamente mejora el emplatado, resultan altamente nutritivas. Unos “Bastoncillos de hojaldre” o unos picatostes, una teja de parmesano vestirán de gala tu plato de sopa o crema que lucirán como nunca en las mejores ocasiónes. Corta en cubos una rebanada de pan de molde y tuéstalos en una sartén sin aceite, y acompaña tus platos de sopa o crema con picatostes. Destierra la idea de que todo debe ser blandito como una papilla, no es comida de bebés, son platos de adultos que pueden encontrarse partes duras en el bocado.

7º) LEGUMBRES, es muy fácil completar una crema o una sopa con lentejas, alubias o garbanzos envasados y previamente cocidos sin que tengamos que dedicarle horas de remojo y cocción. Las legumbres enriquecerán nuestras sopas y cremas, le darán textura y vitaminas. Un requisito importante es volcarlas en un colador y lavarlas bien debajo del grifo para eliminar todo rastro del conservante en el agua en la que vienen envasadas.
CALDOSO O ESPESO, la textura de una crema o sopa depende de los gustos personales, y ahí no te puedo ayudar, lo mejor es empezar por poco caldo y agregar más si nos parece que la textura es muy densa. Corrije la textura si crees que te ha quedado un poco líquida triturando una patata o un puñado de arroz, incluso agregando un par de cucharadas de pan rallado.
8º) CEREALES: Añade a tus sopas o cremas un puñado de arroz para completar el equilibrio nutricional. Enriquece tus sopas con fideos, letras, estrellitas sobre una base de caldo limpio o con pequeñas cantidades de verduras previamente trituradas, sobre todo si entre los comensales hay niñ@s resultará mucho más fácil que coman sin andar separando.

9º) HUEVOS. Siempre son un comodín, bien cocidos, pasados por agua o escalfados (huevos poché) los huevos apuntalarán la más sencillas de las sopas o cremas.

10º EMPLATADO: Busca un emplatado atractivo, juega con los colores, recuerda darle al plato el toque cremoso, agrega una cucharada de yogur, requesón o incluso nata  provocando el contraste de cremosidad y colores.  Recuerda presentar con un punto crujiente, un toque de verde como puede ser perejil, cilantro o cebollino picadito . Y por último, dale el toque de gracia regando con un fínisimo hilo de aceite de oliva virgen extra y disfruta de cuanto gana el plato con ese pequeño detalle.

Con una presentación cuidada  tu sopa o crema se convertirá en un plato realmente apetecible y elegante para tus invitados.

¿Cual es el truco que quieres compartir con nosotros y que hace que tus sopas o cremas de verduras resulten excepcionales?
A disfrutar
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