La focaccia es un pan aplanado tipico de la gastronomía italiana que admite muchas variaciones en su cobertura, desde cebolla, hierbas aromáticas hasta anchoas, quesos, etc. A mí me gusta de cualquier manera pero me entusiasma la más sencilla de las focaccias, la que lleva Romero fresco y se presenta como un simple pan mojado en aceite y sal, ¡¡todo un manjar!!
No hay que tener miedo a hacer una masa pegajosa y bien hidratada sin apenas amasado porque gracias a eso tendremos una focaccia bien esponjosa. Conviene darle caña al horno, no en vano es un pan, aplanado pero un pan, así que una base crujiente resulta deliciosa en el bocado. No es el momento de pensar en dietas, riega generosamente tu focaccia con un buen aceite de oliva y disfrutarás de un manjar.
Es de nivel superior si la haces con MASA MADRE, pero yo si me encuentro sin pan y necesito tomar un camino rápido hago una FOCACCIA DE ROMERO como ésta y la hago con levadura en poco rato y con un resultado sorprendentemente bueno.
- - 600 g de harina de fuerza (y un poco más para trabajar la masa)
- - 50 g de aceite de oliva virgen extra
- - 15 g de levadura fresca de panadería (o un sobre de levadura química en polvo de panadero)
- - 350 ml de agua templada
- - 10 g de sal fina
- Para cubrir
- - Romero fresco
- - Aceite aromático recetaAQUÍ (o de aceite de oliva virgen extra)
- Cebolla cortada muy fina en aros
- - Sal en escamas, tipo MALDON (o sal gruesa, la de toda la vida)
- (por supuesto puedes hacerla en la panificadora o en KA o en la thermomix)
- - Pon la harina en un cuenco en forma de volcán, añade el agua templada con la levadura diluida en ella (ojo no te pases con la temperatura del agua o la levadura perderá propiedades). Añade el resto de los ingredientes y amasa con una mano hasta que todo se haya unido y formado una masa homogénea. Se te pegará bastante aún, es normal. Déjala reposar unos diez minutos y vuelcala en una superficie de trabajo espolvoreada con harina.
- - A continuación trabaja un poco (unos 8 minutos) la masa con estiramientos y pliegues, puedes seguir esta técnica, o simplemente aproximarte a ella, tampoco es la obra maestra del siglo lo que estamos haciendo.
- - Reposo de media hora.
- - Estiramos (a mano o ayudados por un palo de amasar) la masa sobre un papel de hornear, (reposo de 20 minutos) y encendemos el horno a 220º calor arriba-abajo.
- - Con un dedo o con el mango de un utensilio de madera hacemos unas incisiones en la masa que queden como un agujero y vamos poniendo romero fresco y la cebolla cortada fina en aros
- - Horneamos entre 45 y 50 minutos o hasta que veamos que la superficie ha adquirido el color doradito que nos apetece.
- Retirada del horno le pasamos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra, en mi caso aromatizado y espolvoreamos sal gruesa o en escamas.
Antonia
Me encanta ver tus recetas como siempre buenísima receta todo un acierto para el fin de semana la haré seguro gracias.
AMPARO LOPEZ
Querida , tus recetas son fantasticas, son caseras y siguiendo tus recetas salen muy bien, no son nada complicadas, gracias por tantas recetas tan faciles.
frabisa
Muchas gracias, Amparo, me animan mucho tus palabras. Un abrazo enorme
Rosa
Hola Isabel. Enhorabuena por tus blog y gracias por compartir tus recetas; suelo consultarlas con frecuencia , y me resultan en general muy atractivas.
Me gustaría saber como introducir la cebolla o el queso en la focaccia. Igual que el romero?
Gracias